Vendedores formales han denunciado que supervisores, no sólo acuden a los establecimientos de manera altanera y amedrentando a dueños, sino a la mera provocación clausuran locales.

Vaya escándalo el que protagonizarían los supervisores del ayuntamiento de Tlaxcala, quien son los encargados de verificar negocios y comercios, en la capital del estado.

Y es que vendedores formales han denunciado que supervisores, no sólo acuden a los establecimientos de manera altanera y amedrentando a dueños, sino a la mera provocación clausuran locales.

Se han registrado casos de tlaxcaltecas que, si bien no cuentan con la licencia de funcionamiento, sí han demostrado el pago correspondiente, no obstante, los supervisores barren parejo y clausuran el comercio.

Para colmo de males, si la clausura es en fin de semana obliga que el trámite ante jueces sea al lunes siguiente, dejando en indefensión a los vendedores que “salen al día”.

Lo preocupante para el ayuntamiento es el hilo de corrupción que estas actitudes desencadenan, ya que no faltan los jueces que exigen mordidas para acelerar los procesos y salir tablas.

Artículo extraído de: https://intoleranciadiario.com

Escrito por: redacción Tlaxcala

Enlace del artículo original: https://bit.ly/4036LDz

Fotografía: Jess Kraft