¿Existe el trabajo perfecto? Muchos jóvenes creen que si estudian lo que les gusta, o posteriormente si van cambiando de trabajo tras graduarse, previsiblemente lograrán obtener el ‘empleo de sus sueños’. Sin embargo, esto son solo expectativas. Pew Research Center indica en una investigación que el trabajo es una de las cosas que mayor sentido da a la vida adulta.

El periodista laboral y autor Simone Stolzoff, que dedicó buena parte de sus veintes a esta pesquisa, afirma que no existe tal cosa. Sin embargo, las ocupaciones profesionales se han convertido para los trabajadores de clase media en una fuente de propósito, de sentimiento de pertenencia a una comunidad.

Desenredarse del trabajo

El propio Stolzoff quería ser diplomático, abogado o bien poeta, pero metió esos planes en un cajón y se convirtió en periodista, autor y diseñador. Para tratar de responder a esta cuestión escribió el libro «El trabajo suficientemente bueno». En su búsqueda, el mismo preguntó entre 2020 y 2023 a alrededor de 100 trabajadores de todo tipo: chefs con estrella Michelin, profesores agotados, guías de kayak en Alaska o ex ingenieros de Google.

Stolzoff encontró que las personas más felices con su trayectoria profesional, sin importar su ocupación, compartían un enfoque. Todos tenían un profundo sentido de sí mismos cuando no estaban desarrollando sus labores.

Y es que cuando alguien nuevo se presenta, normalmente utiliza su profesión para definirse, ante una de las preguntas más comunes: «¿A qué te dedicas?» Esto es normal, pues normalmente es la actividad a la que más horas al día se dedican.

Diversificarse para no perderse

Entonces, Stolzoff explica que las personas que dediquen tiempo a diversificarse tienen menos posibilidades de «perder el sentido de sí mismas». Añade que quienes han entendido y asimilado esto eran los más felices en el trabajo, a la vez que contaban con las relaciones laborales más sanas.

El mismo ha tratado de ejemplificar este planteamiento en su obra. Por ejemplo, cuenta que la chef encontró mayor inspiración y satisfacción haciendo la cena a sus compañeros de piso, que en un restaurante de 5 estrellas.

Y yendo más allá, cita a la psicóloga Patricia Linville, la cual asegura que las personas con una idea diferenciada de sí mismas son menos propensas a experimentar enfermedades (causadas por estrés) y depresión. Stolzoff dice que: «Somos más que trabajadores, y si somos capaces de cultivar otras facetas de nosotros, entonces también podremos estar más presentes en otros aspectos y enfrentar con éxito las adversidades. Si uno de esos aspectos cae, los demás te mantendrán vivo».

La importancia del descanso

Para ello, dice que uno debe tratar sus diversas facetas como si de una cartera de valores se tratase, «Los inversores destacan la importancia de diversificar los valores. Pues nosotros nos beneficiamos de diversificar aquello que nos de un significado en la vida, sea prestando más atención a tus hijos u ofreciéndote para ayudar en un proyecto por el que sientes pasión».

Esto se traduce para él en que una persona que deja de priorizar su empleo puede volverse más productiva, algo que en última instancia hará que su trabajo le estrese menos. 

Un estudio de 2020 indica que dedicar más tiempo a descansar durante la jornada laboral no solo combate el agotamiento, también puede estimular la creatividad y la productividad. Stolzoff termina diciendo que, aunque pueda sonar «contraintuitivo», el hecho de estar siempre atento al trabajo no implica que se hagan las cosas mejor.

Artículo extraído de: https://www.eleconomista.es

Escrito por: Iago Eguileta

Enlace del artículo original: https://bit.ly/43Qt5lP

Ilustración: Edurs34 / PIXABAY