La participación laboral de las personas con discapacidad (pcd) debe ser una prioridad en México pero la gran incógnita es cómo lograr posicionar un tema que ha sido ignorado durante años, voltear a ver lo que hacen otros países podría ser la solución.
A diferencia de otros países latinoamericanos como Brasil, Chile, Colombia y Perú, México carece de algún sistema o mecanismo que incentive la participación laboral de las personas con discapacidad (pcd), lo que vulnera sus derechos y perpetúa su vulnerabilidad.
Teniendo en mente este panorama, los especialistas Carlos Ferran Martínez y Kelly Aristábal Gómez abordaron esta problemática y cómo el caso colombiano podría servir de modelo para México.
Mientras este año se avanzó en una reforma sobre las vacaciones y actualmente se discute la duración de la jornada laboral, el tema de la inclusión de las pcd permanece intocado aun cuando hay iniciativas pendientes de revisar, apuntaron los especialistas en una columna para El Economista.
“Es natural pensar que el año 2024 será acaparado en atención por las elecciones (…) Por lo mismo, dada la naturaleza social del Derecho del Trabajo, no debería sorprendernos un número importante de iniciativas legislativas en esta materia, de las cuales habremos de analizar cuáles se convertirán en legislación”, señala el editorial.
La legislación colombiana, explican los autores, establece incentivos económicos, cuotas de reserva, ajustes razonables en los centros de trabajo, teletrabajo y responsabilidad social empresarial, todo enfocado a favorecer la equidad e igualdad de oportunidades para las pcd.
“Se trata de un tema verdaderamente ignorado en la legislación mexicana y que, con los alcances e incentivos adecuados, pudiera convertirse en una manera de inclusión para el sector que aquí se comenta, al tiempo de impactar de manera positiva y desde la perspectiva fiscal a las empresas con operaciones en México”, apuntan los autores.
Algunos ejemplos de los incentivos del sistema colombiano, continúa el editorial, son la reducción durante un año de la renta del valor de los salarios y prestaciones sociales pagados a trabajadores con discapacidad, la disminución en cuota de aprendices (que en México podría equipararse a la capacitación inicial, el establecimiento de líneas de crédito para la adquisición de equipos para las pcd, entre otros.
“Gracias a los avances normativos y los diferentes incentivos y estrategias aplicados en Colombia para promover el trabajo de las personas con discapacidad, en los últimos años, se han podido ver avances importantes en este tema, que en otros tiempos era impensable”, señalan los autores.
Aun así, hay desafíos como mayor reglamentación y vigilancia para asegurar el cumplimiento de las obligaciones empresariales, pero no hay duda, dicen los especialistas, de que el modelo colombiano podría servir de modelo en México, justo ahora que el tema laboral está siendo discutido en el Congreso.
Artículo extraído de: https://www.yotambien.mx
Escrito por: Redacción Yo También
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Ilustración: Elf-Moondance / PIXABAY
