Empresas temen contratar servicios especializados por miedo a sanciones
En el mercado hay cautela, por el miedo a las sanciones relacionadas con la subcontratación de servicios especializados, señalan especialistas
En el mercado hay cautela, por el miedo a las sanciones relacionadas con la subcontratación de servicios especializados, señalan especialistas
¿Habías escuchado sobre el “estrés térmico ocupacional”? Pon atención, porque este término le pone nombre a las consecuencias en la salud que las olas de calor implican para las y los trabajadores.
Un doctor, identificado como Shingo Takashima, se quitó la vida en Japón luego de que trabajó más de 200 horas extras en un mes, así lo dio a conocer su madre, en conferencia de prensa en el Kita Ward de Okasa.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) implementa diversas acciones en coordinación con la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STyPS), con el propósito de identificar empresas que aplican la subcontratación laboral conocida como outsourcing.
En un escenario laboral marcado por desafíos y demandas constantes, el estrés se ha convertido en una preocupación de gran magnitud en México. Según un estudio del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el 75% de los trabajadores mexicanos padece niveles significativos de estrés laboral, una cifra que arroja luces alarmantes sobre la salud mental de la fuerza laboral del país.
La importancia de mantener un entorno limpio y seguro en los lugares de trabajo donde circulan muchas personas no puede ser subestimada, ya que la limpieza no sólo mejora la salud y reduce las enfermedades, sino que también aumenta la productividad y genera una excelente imagen como empresa. Es por ello que la Secretaría de Turismo de México creó el Sello Punto Limpio, con el fin de garantizar que estas condiciones se conviertan en el estándar.
Algunos de los elementos contemplados por la NOM-035 que afectan particularmente la salud de los trabajadores son el estrés laboral, la carga del trabajo y las jornadas laborales extensas.
Las redes sociales y los mensajes sobre un éxito basado en un ritmo de trabajo sin descanso, sacrificando incluso la vida personal, han contribuido a fomentar la “cultura del ajetreo”. Pero laborar bajo dicha modalidad puede perjudicar tanto la salud de las personas como su productividad.
El síndrome de burnout puede tener consecuencias muy graves, como la depresión y ansiedad, motivos de la gran mayoría de las bajas laborales.