Se ha dejado de lado la NOM 035 que busca analizar y prevenir los factores de riesgo psicosocial y promover un entorno organizacional favorable en los centros de trabajo

Desde que entró en vigor en el 2020 la Norma Oficial Mexicana 035 cuyo objetivo es establecer los elementos para identificar, analizar y prevenir los factores de riesgo psicosocial, así como para promover un entorno organizacional favorable en los centros de trabajo, pocas empresas a la fecha le han dado seguimiento.

De acuerdo con la información proporcionada por Rogelio Padilla de León secretario general del Sindicato de la Industria Automotriz y Metalmecánica, quien reconoció que la norma 035 es un modelo bien intencionado ya que busca impulsar que el trabajador tenga un clima laboral favorable, agradable y que no le cause un problema de estrés y saturación para prevenir que no tenga desajustes emocionales que recaigan en su físico y vida cotidiana.

Sin embargo, “yo sí creía que esto vendría a cambiar la vida laboral de los trabajadores de manera importante, pero la realidad es que no ha sido así, han pasado meses y años y ahí sigue en teoría, lamentablemente en las empresas se siguen dando abusos, hostigamiento laboral por parte de los mandos medios y la instancia facultada para revisar y hacer valer esta norma está enfocada en otros temas y poco se ha metido en el tema”.

Padilla de León subrayó que, la Secretaría del Trabajo y previsión social está obligada a realizar inspecciones a fuentes de trabajo, entrevistar a los trabajadores para que le indiquen cómo están trabajando, en qué condiciones, horarios y que se revisen las jornadas que muchas veces se les imponen de 4×3 o de tiempos extras ya que, “en las mayoría de las veces, el trabajador está sujeto a una presión extrema, los horarios no les permite tener una convivencia sana en familia que muchas veces desemboca en problemas familiares e incluso divorcios”.

Destacó que los compromisos que adquieren los patrones recaen en los trabajadores, “se obtienen compromisos con los clientes en los cuales se comprometen a dar ciertos requerimientos que muchas veces no tienen la capacidad, es decir, el cliente pide tantas partes de esto y las empresas en el afán de hacer negocio a todo dicen que sí, entonces se presionan y el trabajador está sujeto a ese estrés que se le compromete, si bien, son subordinados, pero eso no implica que tengan que hacer todo lo que el patrón diga, como él lo quiera, a la hora que él quiera ni de la manera que él lo quiera, ya que eso los lleva a vivir en un máximo estrés”.

Artículo extraído de: https://www.elsoldelcentro.com.mx

Escrito por: Silvia Ortiz

Enlace del artículo original: https://shorturl.at/uIlUf

Ilustración: storyset Freepik