La población de México es la más feliz del mundo y tiene uno de los mejores niveles de bienestar mental, pero fuera de la oficina. Es más, mientras 74% de las personas dice sentirse satisfecho con su vida, sólo el 24% considera que tiene un estado alto de productividad en su trabajo, revelan datos del Índice de Salud Mental de Axa 2023.
De acuerdo con las cifras proporcionadas en el informe, el 64% de las personas en nuestro país manifiesta ser feliz, el mejor nivel del comparativo internacional y un dato 14 puntos porcentuales por arriba del promedio global (50.3%). En cuanto a bienestar, el 31% considera que su salud mental “está prosperando” y otro 36% que está “saliendo adelante”, dicho de otra forma, el 67% tiene un buen o muy buen nivel en esta materia.
Sin embargo, al llevar las cifras al terreno laboral, el escenario cambia, pues el 67% de las personas trabajadoras en México considera que tiene un estado mental de productividad moderado y sólo el 24% se siente altamente productivo. Es decir, en el panorama general, la misma proporción de personas es feliz, con un buen nivel de bienestar mental, pero con resultados laborales de término medio.
Esta discrepancia resuena más al considerar que del comparativo de Axa también se desprende que el sueño más grande de los mexicanos es “encontrar la carrera profesional perfecta”, mientras en otros países las personas están divididas entre “volverse ricos” y “tener una buena salud”.
El lugar de trabajo puede ser una fuente de estrés, se advierte en el reporte, pero si se presentan las condiciones adecuadas, éstos se pueden convertir en espacios para la creatividad y el desarrollo de los colaboradores. Además, existe una correlación entre el bienestar personal y los niveles de retención de las empresas. De hecho, 32% de quienes admiten estar luchando con su salud mental reconocieron que tienen pensado renunciar a su trabajo.
En el caso de México, las personas con un empleo identificaron cinco elementos que consideran que se pueden convertir en un factor diferenciador para mejorar sus niveles de productividad mental y su sentido de pertenencia respecto a su trabajo, éstos son:
- Esquemas de trabajo híbridos
- Programas de apoyo a la salud mental por parte de las empresas
- Mayor control sobre las cargas laborales
- Respaldo para el desarrollo de habilidades
- Claridad sobre los objetivos y motivos de sus tareas.
En años recientes, se puntualiza en el reporte, la pandemia de Covid-19, el fenómeno conocido como “la gran renuncia”, el cual ha llevado a miles en economías avanzadas a dejar sus empleos en búsqueda de mejores condiciones laborales, y la crisis inflacionaria y su impacto en el costo de vida han fomentado una mayor consciencia sobre la salud mental tanto entre las personas como en las empresas.
En otras palabras, “están conscientes de que el estrés, el burnout y una salud mental deteriorada son malas para el negocio”, expresó Jan Hutchinson, directora de Operaciones del Centro de Salud Mental dentro del estudio.
A decir de Antimo Perretta, CEO de Axa Europa y América Latina, “promover una buena salud mental comienza por identificar los factores que la afectan. Es importante identificar cuáles son los que están dentro del campo de influencia de las personas, así como los factores que están claramente fuera de su control, como el cambio climático o la Covid-19. De esta manera, las personas comenzarán a desarrollar las habilidades necesarias para hacerle frente a los problemas cuando surjan”.
El Estudio sobre la salud mental y el bienestar en 2023 de Axa fue realizado en conjunto con la encuestadora Ipsos y contempla una lista de 50 preguntas realizada a un universo de 16,000 personas en 16 diferentes países. La de este año es su tercera edición y la primera que incluye a México dentro del análisis.
En la experiencia de la firma en México, entre las iniciativas que las empresas pueden echar a andar para fomentar el bienestar de sus colaboradores destacan, por un lado, los programas de cuidado integral de la salud y de atención al empleado con apoyo psicológico, orientación sobre alimentación, finanzas personales y temas legales; por el otro, el rediseño de los espacios de trabajo para fomentar la convivencia, las pausas activas dentro de la jornada y la conformación de grupos de voluntarios para la promoción de la salud mental.
Salud mental y brecha de género
Como en muchas otras mediciones, la realidad que viven los hombres respecto a su bienestar es muy diferente a la que experimentan las mujeres. En México, mientras el 67% de ellos reporta ser feliz, la proporción entre ellas disminuye a 62 por ciento.
Entre los elementos que afectan el bienestar de las personas, por ejemplo, la brecha salarial y la desigualdad en la distribución en las tareas del hogar y de cuidados tienen mayor impacto emocional negativo entre las mujeres, con un nivel de 76 y 60% respectivamente, que entre los hombres (70 y 53%).
Además, de la información proporcionada por Axa en nuestro país se desprende que el factor más importante en la brecha de género en salud mental es el sexismo cotidiano, reflejado en comentarios no deseados y en cuestionamientos a la capacidad y habilidades por cuestión de género.
“Las mujeres están expuestas al doble de situaciones de sexismo que un hombre en el ambiente laboral. Las mujeres que experimentan sexismo de manera cotidiana a nivel nacional reportan mayores niveles de sentimientos de soledad (77%), imagen negativa sobre el cuerpo (61%) e inequidad en las responsabilidades domésticas (60%)”, puntualizó la firma.
Artículo extraído de: https://www.eleconomista.com.mx
Escrito por: Felipe Morales Fredes
Enlace del artículo original: https://bit.ly/404OHcR
Ilustración: Mohamed Hassan / PIXABAY