Vacaciones, Home Office y Outsourcing son tres claras regulaciones a tomar en cuenta este año. ¿Tu empresa está preparada?
La Ley Federal del Trabajo ha integrado nuevas reformas en los últimos años y este 2022 no será la excepción, pues se proyecta incorporar modificaciones a las vacaciones laborales de ley extendiéndose de seis a 12 días. ¿Cuáles son los principales cambios a observar este año en materia laboral? Aquí los repasamos.
Más días de Vacaciones
Como mencionamos anteriormente, la extensión del periodo vacacional en la Ley Federal del Trabajo parece un cambio inminente que podría darse este año. El Senado de México tiene un proyecto de ley que busca elevar el mínimo de vacaciones de seis a 12 días al cumplir un año laborando. Han sido presentadas diferentes propuestas que contienen estas características:
- Incrementar en dos días por cada año subsecuente hasta acumular 20 días.
- Después de ello, como se contempla en el esquema actual, aumentará en dos días al completar un ciclo de cinco años de antigüedad.
- Brindar de seis a 10 días de vacaciones para trabajadores que cumplan seis meses en un determinado trabajo.
Trabajo Remoto regulado
El Home Office se volvió una tendencia laboral en México a raíz de la pandemia, por lo que desde finales del 2020 hasta 2021 se comenzaron a regular las prácticas del trabajo remoto. Los principales aspectos que se han legislado para estandarizar el marco legal del teletrabajo son los siguientes:
- Contar con equipo necesario para sus actividades.
- Costos derivados del trabajo como internet y electricidad.
- Mecanismos de seguridad para la información y datos utilizados.
- Desconexión al término de la jornada laboral.
- Balance de vida personal y disponibilidad de los trabajadores con perspectiva de género.
- Cuidar los equipos, materiales y útiles que reciban del empleador.
Utilidades bajo el Nuevo Outsourcing
La reforma al outsourcing en México ha introducido modificaciones en ocho leyes, pero principalmente a la Ley Federal del Trabajo. Entre las más destacadas se encuentran la prohibición de la subcontratación de personal y la apertura al concepto de “Servicios especializados y obras especializadas”: una categoría de prestación de servicios que no formen parte del objeto social ni de la actividad económica principal de la empresa beneficiaria.
Como parte de este concepto se vuelve obligatorio el uso de contratos y autorizaciones de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), así como la responsabilidad solidaria de la empresa en caso de que el prestador de servicios especializados incumpla con las obligaciones.
Asimismo, el reclutamiento por parte de las agencias de colocación no se prohíbe, aunque sí se limita su rol exclusivamente al proceso de selección, no de contratación. Las multas por incumplimiento van de las 2.000 a 50.000 UMAs.
El reparto de utilidades (PTU) fue uno de los temas más polémicos en la reforma de outsourcing al establecer pasar de un pago promedio de 22 a 57 días de salario en promedio.
De acuerdo con El Economista, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) estima que como resultado de la reforma y el reconocimiento de los trabajadores por sus patrones reales, la proporción de ganancias a repartir entre la fuerza laboral pasará de 2.8 a 7.7% en 2022. Esto representa un incremento de más de 100,000 millones de pesos.
Artículo extraído de: https://www.liderempresarial.com
Escrito por: Alexa Victoria
Enlace del artículo original: https://bit.ly/3tNV4U6
